En el aniversario de la masacre del 7 de octubre, un grupo de manifestantes pro-Hamas realizó una oración pública frente a la Bolsa de Valores de Bruselas, pidiendo a Alá que “quemara a los judíos”. La manifestación, que refleja el creciente apoyo a Hamas y los sentimientos antiisraelíes, incluyó cánticos de “Del río al mar” que han sido comunes en Bruselas. Aunque Hamás está oficialmente designado como grupo terrorista por la Unión Europea, las entidades afiliadas al movimiento siguen activas en varios países.
Joël Rubinfeld, presidente de la Liga Belga Contra el Antisemitismo, lamenta el dramático aumento del antisemitismo en Europa y dice que la atmósfera hostil en Bruselas se asemeja a Gaza. “Es un tsunami de antisemitismo que se extiende por todo Occidente”, dijo Rubinfeld. Dijo que los judíos en Bélgica y otras partes de Europa estaban considerando abandonar sus países por temor a la seguridad. “Este es un fracaso de la democracia, un fracaso de Bélgica”, dijo.
Según CBN, Gran Bretaña también se enfrenta a un alarmante aumento de los delitos antisemitas, que se han duplicado con creces en el último año, mientras que Francia y Alemania informan de un aumento similar. El periodista David Collier, un judío británico, se declaró pesimista sobre el futuro de los judíos en Gran Bretaña, debido al cambio demográfico y la radicalización que observa en la sociedad. Describe a Europa como “perdida” en términos de seguridad para los judíos y lamenta: “Simplemente no veo un camino de regreso”.
Las organizaciones judías están recurriendo a direcciones secretas y a reforzar la seguridad. Gideon Falter, de la Campaña Británica contra el Antisemitismo, cree que el fenómeno es una consecuencia de la “radicalización de la sociedad”, donde, cada vez más, la discriminación contra los judíos es vista como “justa” por algunos grupos.